Me acosté y me levanté en Suiza. sola.
Se disfruta el fin de mi condición de nómade, las sopas instantáneas de 60 calorías con gusto a pimienta, los pájaros en la higuera a la mañana.
Se complica mi delirio, mi conciencia adquirió el síndrome de Jacques Cousteau. Los síntomas: sensación de cabeza sumergida en aguas azules profundas, una voz en off en francés (obviamente básico) relata mis acciones: "Maintenant, je vais lire un peu plus, et après je vais me préparer un repas merveilleux"
Una después de la otra. a veces se anticipa. las describe todas.
No sé si estoy siguiendo una secuencia de acciones básicas condicionada por la pobre capacidad de mi francés.
Au revoir, merci, bonne soiree -
Se disfruta el fin de mi condición de nómade, las sopas instantáneas de 60 calorías con gusto a pimienta, los pájaros en la higuera a la mañana.
Se complica mi delirio, mi conciencia adquirió el síndrome de Jacques Cousteau. Los síntomas: sensación de cabeza sumergida en aguas azules profundas, una voz en off en francés (obviamente básico) relata mis acciones: "Maintenant, je vais lire un peu plus, et après je vais me préparer un repas merveilleux"
Una después de la otra. a veces se anticipa. las describe todas.
No sé si estoy siguiendo una secuencia de acciones básicas condicionada por la pobre capacidad de mi francés.
Au revoir, merci, bonne soiree -
No hay comentarios:
Publicar un comentario